Reforma de los contratos formativos 2025: Oportunidades y obligaciones para empresas y autónomos
Reforma de los contratos formativos 2025
El 25 de noviembre de 2025, el Gobierno aprobó la nueva regulación de los contratos formativos, completando la reforma iniciada en 2022 para transformar el sistema de inserción laboral y formación en España. Esta modificación introduce un marco más claro y seguro tanto para empresas como para trabajadores, reforzando los derechos laborales y fomentando una formación vinculada a las necesidades reales del mercado.
La normativa oficial puede consultarse en la referencia del Consejo de Ministros publicada por La Moncloa.
¿Qué cambia con la reforma de contratos formativos de 2025?
La nueva regulación establece únicamente dos modalidades:
1) Contrato de formación en alternancia
Pensado para personas que compaginan empleo y estudios.
Incluye novedades clave:
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Derechos laborales plenos, como el resto de trabajadores.
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Salario garantizado, proporcional al tiempo de trabajo y nunca por debajo del SMI.
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Doble tutoría: un tutor en la empresa y otro en el centro educativo.
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Regulación más estricta para asegurar que las tareas se correspondan realmente con el programa formativo.
2) Contrato para la obtención de práctica profesional
También con derechos completos, dirigido a titulados recientes.
Incluye:
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Relación más clara entre funciones y estudios cursados.
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Prohibición de tareas ajenas al perfil formativo.
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Mayor control para evitar figuras pseudo-laborales disfrazadas de prácticas.
Medidas para combatir prácticas abusivas
La reforma introduce herramientas para evitar irregularidades:
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Mayor vigilancia de la Inspección de Trabajo.
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Limitación clara de tareas impropias del contrato.
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Registro de tutores y responsabilización de la empresa.
Esto implica que las empresas deben documentar adecuadamente los itinerarios formativos y justificar la adecuación entre formación y trabajo.
¿Cómo afecta a empresas, pymes y autónomos?
La aprobación de esta regulación tiene impactos directos:
✔ Más seguridad jurídica
Las modalidades son más claras y sencillas, reduciendo errores en la contratación.
✔ Mejora en la captación y retención de talento joven
Ofrece salarios dignos y formación de calidad, facilitando la fidelización del trabajador.
✔ Nuevas obligaciones administrativas
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Plan formativo detallado.
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Asignación de tutor empresarial.
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Coordinación obligatoria con centros educativos o entidades formativas.
✔ Costes laborales más previsibles
El salario proporcional al SMI crea un marco estable para planificar la incorporación de personal en formación.
Oportunidades para el tejido empresarial
Para pymes y autónomos con empleados, estos contratos se convierten en una herramienta estratégica:
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Facilitan reciclaje profesional y perfiles adaptados a las necesidades reales del negocio.
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Fomentan el crecimiento interno mediante aprendizaje estructurado.
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Potencian la incorporación de talento sin renunciar a la protección laboral.
Además, se espera que estas modalidades sigan contando con incentivos y bonificaciones, como ha ocurrido en reformas previas.
Conclusión y recomendación CISE
La reforma de los contratos formativos de 2025 obliga a empresas, pymes y autónomos a revisar cómo gestionan la incorporación de talento joven y cómo estructuran sus planes formativos internos. Los nuevos requisitos —plan formativo, doble tutoría, salario proporcional al SMI y mayor control de la Inspección— hacen necesario actualizar procedimientos y modelos contractuales para cumplir la normativa y aprovechar las oportunidades que ofrece.
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